MÁLAGA: España abre el lunes sus fronteras a los viajeros vacunados de todo el mundo, con la esperanza de que una afluencia de visitantes revitalice su importantísimo sector turístico, golpeado por la pandemia del coronavirus.
«España es un destino seguro», insistió la ministra de Sanidad, Carolina Darias, quien añadió que el país está «en proceso de recuperar su liderazgo mundial en turismo.»
Los europeos no vacunados -que actualmente pueden entrar en España con una prueba de PCR negativa realizada en un plazo de 72 horas- podrán realizar a partir del lunes una prueba de antígenos más barata.
Pero, en un revés, el Reino Unido, un enorme mercado turístico para el país, aún no ha retirado a España de su lista de países de riesgo, lo que significa que los viajeros británicos tendrán que pasar la cuarentena a su regreso a casa, además de pagar las costosas pruebas Covid-19.
Los británicos suelen constituir el mayor contingente de turistas a España: en 2019 más de una quinta parte de los 83,5 millones de llegadas a España fueron del Reino Unido.
A pesar de ello, los responsables del sector turístico siguen esperando una oleada de visitantes en verano.
José Luis Prieto, presidente de la Unión de Agencias de Viajes de España (Unav), espera una «recuperación espectacular» a partir del lunes.
Según él, en las últimas semanas los operadores turísticos de Gran Bretaña, Francia y Alemania -los tres principales mercados de España- han recibido un gran número de consultas.
En todo el país, desde la Costa del Sol hasta las Islas Canarias, los hoteles y restaurantes están reabriendo después de meses de cierre, y las compañías aéreas han reanudado las rutas que se abandonaron durante el apogeo de la pandemia.
El aeropuerto de Málaga esperaba unos 20 vuelos diferentes sólo el lunes por la mañana, procedentes de lugares de toda Europa como Berlín, Lille, Frankfurt y Londres.
España también volverá a permitir la entrada de cruceros en sus puertos a partir del lunes.
Decisión británica «decepcionante
La decisión británica de mantener a España en su lista ámbar fue, sin embargo, «decepcionante», dijo la ministra de Sanidad.
España había puesto en marcha varias medidas para atraer a los turistas británicos a sus costas, como permitirles entrar sin tener que presentar una prueba de PCR desde finales de mayo.
La ministra de Turismo española dijo el viernes que no entendía la negativa del Gobierno británico a permitir que ciertas zonas de España donde los casos de Covid-19 son bajos, como las Islas Canarias, estén en su lista verde.
En este contexto de incertidumbre, el gran operador turístico TUI ha cancelado todos sus vuelos a España hasta el 13 de junio.
Londres no revisará su decisión hasta dentro de tres semanas, un tiempo precioso para los hosteleros que esperan recuperar parte de las pérdidas de 2020, cuando la llegada de visitantes cayó un 77% respecto al año anterior.
España, que depende en gran medida de su industria turística, fue una de las economías occidentales más afectadas por la pandemia, con una caída del 10,8% de su PIB en 2020.
El gobierno español se ha fijado como objetivo atraer a 45 millones de viajeros para finales de año.
Pero a finales de abril, el país sólo había recibido 1,8 millones de visitantes, según las estadísticas oficiales.