Mientras las playas españolas se llenan, un balneario envía los drones

SITGES, España – Ante la ola de calor que hace que las hordas de personas acudan a la playa, las autoridades de la ciudad costera de Sitges, en el noreste de España, están probando el uso de drones para vigilar a las multitudes en tiempo real y contrarrestar el rápido aumento del contagio de COVID-19.

«Es un sistema pionero», afirma Ricardo Monje, operador de drones de la empresa promotora del proyecto, Annunzia ES. «Podemos hacer fotos, pasarlas por un software y con el software podemos contar cuántas personas hay en la playa».

El proyecto piloto durará hasta el 22 de agosto y debería permitir a las autoridades reaccionar más rápidamente ante las aglomeraciones que se forman a lo largo de los 18 kilómetros de playa de Sitges, según el Ayuntamiento.

«Si vemos que la playa está muy concurrida, podemos transmitir esa información a los vigilantes de la playa, que harán comprobaciones y se asegurarán de que la gente mantiene la distancia», dijo el funcionario local Guillem Escola.

«Si la gente no hace caso, entonces enviamos a la policía».

El ayuntamiento afirma que el proyecto respetará todas las leyes de protección de datos y garantizará el anonimato de las imágenes captadas de las personas, pero algunos habitantes de la zona están preocupados.

«Creo que es una buena idea, pero deben comunicarse con la población e identificar el dron porque, de lo contrario, es una intervención en nuestras libertades civiles», dijo Jimmy Burns, un periodista y escritor anglo-español que vive en Sitges.

La policía de Madrid ya ha utilizado drones equipados con focos y altavoces para localizar y disolver fiestas al aire libre.

Espoleada por la variante Delta, muy contagiosa, y por el fuerte aumento de las relaciones sociales entre los jóvenes, la incidencia del COVID-19 en España se ha triplicado con creces en las últimas dos semanas.

Las autoridades regionales de Cataluña, que tiene la tasa de contagio más alta de España en 14 días, con 1.068 casos por cada 100.000 habitantes, más del doble de la media nacional, dijeron el miércoles que impondrían un toque de queda en 158 municipios, incluido Sitges.