Los robots podrían tener tacto
¿Te gustaría saber cuál ha sido el último trabajo efectuado por científicos en relación a la robótica? De responder afirmativamente ¡Te invitamos al leer este artículo!
Un grupo de investigadores de la Universidad de Stanford, colaborando con la Universidad Nacional de Seúl, han logrado desarrollar un sistema nervioso sensorial artificial que ha tenido la capacidad de activar el reflejo de contracción de una cuchara, además de identificar las letras en el alfabeto Braille. La revista Science fue la encargada de publicar los resultados de este trabajo.
¿En qué consiste el trabajo efectuado por investigadores coreanos y estadounidenses?
A través de la creación de piel artificial para las extremidades protésicas se lograría restaurar la sensación en los apuntados y, además, podría algún día proporcionarles a los robots cierta capacidad de reflejo. De hecho, este circuito nervioso sensorial artificial podría integrarse en una futura cubierta que sea parecida a la piel de robótica blanda y dispositivos de carácter neuro-protésico.
El sistema cuenta con 3 componentes principales. El sensor táctil brinda la capacidad de detectar fuerzas minúsculas; posee también una neurona electrónica flexible y un transistor sináptico artificial que ha sido modelado tomando en consideración la sinapsis humana. En una de las pruebas efectuadas se conectó el nervio artificial a la pata de cuchara y se realizaron pequeños incrementos de presión en el sensor táctil. Esto ocasionó que la neurona electrónica convirtiera la señal de sensor en señales digitales, logrando transmitirla a través de un transistor sináptico, lo que ha provocado que la pata de la cuchara pudiese moverse a medida que se ejecutaban cambios en el sensor táctil.
Asimismo, se demostró que el sistema podía detectar una variabilidad de sensaciones táctiles. En otro de los experimentos el nervio artificial tuvo la capacidad de diferenciar letras de Braille. Mientras que, en otros de los experimentos, se hizo rodar un cilindro sobre el sensor en distintas direcciones, llegando a detectar la dirección del movimiento con precisión.
A pesar de esto, los investigadores han planteado el hecho de que esta tecnología se encuentra todavía en su infancia. De modo que, a modo de ejemplo, la creación de recubrimiento artificial en los dispositivos protésicos necesitará de nuevos dispositivos para que pueda detectarse el calor y diversas sensaciones.
Los científicos planean crear redes sensoriales de baja potencia que pueda cubrir a los robots, de forma que sean más ágiles en el proceso de proporcionar algunos datos que los humanos adquieren de la piel.
¿Cuál es la percepción futura de esta nueva tecnología?
Es innegable que el sistema nervioso artificial es uno de los avances más significativos dentro del ámbito de la robótica, que estipula un elevado surgimiento de las bases que determinarían el crecimiento a largo plazo de este tipo de maquinaria; elevando, por supuesto, la efectividad en los distintos usos que podrían darse.
La robótica y la inteligencia artificial van tomadas de la mano. Ambas tecnologías se muestran cada vez más dispuestas a contribuir con el desarrollo de distintas áreas cotidianas, a pesar de la percepción negativa que distintos magnates tecnológicos o grupos negativas tengan respecto a la misma.